Este es el cambio generacional. Leo en el
periódico que Slavoj Zizek dice que lo de fuera importa tanto como lo de
dentro. Ahora veo claro qué diferencia las últimas generaciones. No se trata de
las redes sociales a las que mi generación tiene acceso, donde caben todos,
tanto los que aprendimos la cultura de la introspección y todavía respetamos el
psicoanálisis o el surrealismo, como los de la cultura vertiginosa de lo
externo donde lo de dentro sale por defecto, tras un volcado masivo de
pulsiones externas.
Observo a los otros y sigo hasta donde
puedo alcanzar y cuando llego a la cultura de las revistas con pluralidad de
fotos en movimiento donde cada periodista o escritor actualiza sus propios
contenidos tres o cuatro veces al día,
me doy cuenta de que no quiero consumir en ellas mi tiempo, y hay muchas,
con el inglés como lengua común, contenidos interesantes, curiosos, excitantes,
nada de política (mal), el arte mezclado con el consumo aceptado, la moda y el
diseño, los tatuajes, la poesía rápida, la fotografía… Bien. Miraré de vez en
cuando. Adrenalina.
(©maríajosécodes)